El emblemático Intercambiador Bicentenario de Bogotá se acerca a la culminación de una profunda intervención que busca mejorar la experiencia de los miles de ciudadanos que lo transitan diariamente. Con un avance del 93.79%, las obras se enfocan en la renovación total del piso de la plazoleta, la pintura de barandas y muros laterales, y la reparación de fisuras en la cara adyacente de la estructura.
Más de 70 personas trabajan arduamente para renovar este importante punto de encuentro de la ciudad. La elección de polímeros y epóxicos como nuevo material para el piso responde a la necesidad de un material altamente resistente y duradero, capaz de soportar el alto flujo peatonal que caracteriza al Intercambiador Bicentenario. Esta decisión también busca evitar el vandalismo y el hurto de losetas, problemas que se presentaban con el material anterior.
La intervención, que se extenderá hasta finales del segundo trimestre de 2024, busca mejorar la seguridad y la estética del intercambiador, brindando una experiencia más agradable a los peatones. La inversión de más de $2.700 millones refleja el compromiso del IDU por renovar la infraestructura de la ciudad y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
El Intercambiador Bicentenario, con su diseño de tres niveles, permite una circulación fluida y segura de peatones, vehículos particulares, taxis y buses de TransMilenio. En el nivel inferior, circulan los buses de TransMilenio, mientras que en el nivel intermedio se encuentra la zona peatonal. El nivel superior está destinado a la circulación de vehículos particulares y taxis.
La intervención en la circulación peatonal y los 1.438 metros cuadrados de plazoleta beneficiarán a cerca de 650.000 personas que transitan diariamente por este importante punto de conexión de la ciudad. La modernización del Intercambiador Bicentenario contribuirá a la construcción de una Bogotá más moderna, segura y agradable para sus habitantes.
En los próximos días, se finalizarán las actividades de remate de acabados del piso, la pintura de muros y barandas, y la instalación de rejillas en los cárcamos de los cuatro accesos a la plazoleta. Estas acciones marcarán el final de la intervención y la entrega de una infraestructura renovada a la ciudad.
La renovación del Intercambiador Bicentenario es un claro ejemplo del compromiso del IDU por mejorar la infraestructura de Bogotá. La inversión en la modernización de este importante punto de la ciudad demuestra la voluntad de las autoridades por construir una Bogotá más moderna, segura y con una mejor calidad de vida para sus habitantes.