El Cabildo Indígena Muisca de Suba y la comunidad claman por justicia y exigen a las autoridades el pronto esclarecimiento del atroz crimen que cobró la vida de Julio Enrique Niviayo Niviayo, un respetado mayor indígena de 73 años, asesinado la noche del domingo 19 de octubre en el barrio Los Naranjos, UPZ El Rincón de Suba.
La noticia ha sumido al territorio ancestral en un profundo dolor e indignación. Según las primeras versiones, el lamentable suceso se habría producido en medio del hurto de su teléfono celular, una acción de violencia que terminó de forma trágica con la vida de Don Julio, reconocido por su sabiduría y la armonía que cultivaba en la comunidad. Su asesinato enluta un territorio que por generaciones ha sido un símbolo de tradición y resistencia indígena.
A través de un comunicado oficial, el Cabildo Muisca de Suba manifestó su enérgico rechazo a la impunidad y al silencio institucional que, a su juicio, ha rodeado este crimen. La exigencia es clara: la Administración Distrital, la Fiscalía General de la Nación y la Rama Judicial deben adelantar con diligencia y celeridad las investigaciones necesarias para identificar, capturar y sancionar a los responsables.
«La vida de un mayor indígena no puede quedar reducida a una estadística más», expresó el Cabildo en su comunicado, haciendo un llamado urgente a las autoridades para que este crimen no quede impune y para que se recupere el respeto por la vida y por el territorio ancestral que hoy se ve amenazado por la creciente inseguridad en la ciudad.
El asesinato de Don Julio Niviayo es visto por la comunidad como un reflejo de la violencia que azota a la capital y representa una pérdida invaluable para el pueblo muisca. La comunidad de Suba se une al llamado del Cabildo, demandando acciones concretas que garanticen la seguridad y el respeto por los derechos de los pueblos originarios en la ciudad.












