La Alcaldía Mayor de Bogotá ha presentado un plan de acción para enfrentar la próxima temporada de lluvias, en el marco del fenómeno de La Niña, que se estima comenzará a mediados de agosto y podría extenderse hasta principios de 2025. El alcalde Carlos Fernando Galán destacó que la ciudad está preparada para gestionar emergencias relacionadas con el clima, con un enfoque integral para proteger a los ciudadanos y minimizar los daños.
El distrito ha asignado $55 mil millones para la atención de emergencias a través del IDIGER, además de contar con el apoyo del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá y otras entidades clave como la UAESP, el Acueducto de Bogotá y la Secretaría de Ambiente. Este esfuerzo coordinado tiene como objetivo asegurar una respuesta rápida y efectiva ante los posibles eventos climáticos severos que se avecinan.
Hasta la fecha, se ha brindado asistencia a 174 familias afectadas por eventos climáticos recientes. La ayuda ha sido proporcionada de manera integral por el distrito, abarcando desde evacuaciones hasta la entrega de suministros necesarios para mitigar el impacto de las lluvias. Este apoyo es parte del compromiso del gobierno local para proteger a los ciudadanos durante la temporada de lluvias.
El distrito ha clasificado las zonas de riesgo en Bogotá, identificando áreas susceptibles a caída de árboles, avenidas torrenciales, movimientos en masa, inundaciones y desbordamiento de ríos o quebradas. Entre las zonas más vulnerables se encuentran Usaquén, Chapinero, San Cristóbal, Engativá, Suba, y Barrios Unidos, entre otras. Esta clasificación permitirá enfocar los esfuerzos de prevención y respuesta en las áreas más críticas.
La Unidad Administrativa de Servicios Públicos (UAESP) ha alertado sobre la acumulación de más de 55 mil toneladas de residuos en las redes de alcantarillado y cuerpos de agua. Consuelo Ordóñez, directora de la UAESP, hizo un llamado a la ciudadanía para evitar arrojar basuras al alcantarillado, ya que la colmatación del sistema contribuye a las inundaciones. Se reforzarán las brigadas de recolección para prevenir estos problemas.
El fenómeno de La Niña, caracterizado por el enfriamiento de las aguas superficiales del Océano Pacífico, provoca cambios significativos en los patrones meteorológicos. En Colombia, se espera que este fenómeno impacte especialmente en las regiones andina y caribe, intensificando las lluvias y afectando las condiciones climáticas. La Alcaldía de Bogotá, junto con las diferentes entidades involucradas, está tomando medidas para garantizar la seguridad y la preparación ante estos desafíos.
