En un hito trascendental para la salud pública y la autonomía científica del país, Colombia ha logrado un avance significativo en su soberanía sanitaria con la aprobación del registro sanitario, por parte del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), a la Universidad de Antioquia. Esta histórica autorización permite la producción nacional de cloroquina en tabletas de 150 mg, un medicamento esencial y vital en el tratamiento de la malaria, una enfermedad que sigue afectando a miles de colombianos, especialmente en zonas vulnerables.

Una Alianza Estratégica para la Salud
Este importante desarrollo es el resultado de una alianza estratégica sin precedentes entre el Estado colombiano y la academia, demostrando el poder de la colaboración interinstitucional. La Universidad de Antioquia (UdeA) ha liderado con maestría este proceso, contando con el respaldo fundamental del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Este ministerio ha jugado un papel crucial al administrar los recursos del Fondo de Investigación en Salud (FIS), inyectando el capital necesario para llevar a cabo esta ambiciosa iniciativa. Asimismo, el Ministerio de Salud y Protección Social ha sido un pilar en este proyecto, asegurando la alineación con las políticas de salud pública del país.
Lo destacable de este logro es que todo el proceso de desarrollo y producción se ha llevado a cabo en la única planta pública de producción farmacéutica del país certificada por el Invima. Esta característica no solo subraya la capacidad técnica y científica de Colombia, sino que también refuerza el compromiso con la salud pública desde una infraestructura estatal robusta y confiable.
Más Allá de lo Técnico: Una Decisión Política y Simbólica
El apoyo incondicional del Gobierno nacional fue clave para concretar este logro, que trasciende lo meramente técnico y económico. La producción de cloroquina en suelo colombiano es, en esencia, una decisión política y simbólica. Representa una ciencia concebida desde y para los territorios, que entiende el derecho a la salud como un componente esencial de una política de Estado. Esta visión refuerza la idea de que el conocimiento y la innovación deben estar al servicio de las necesidades más apremiantes de la población, garantizando el acceso equitativo a medicamentos vitales.
Garantía de Suministro Oportuno y Gratuito
Gracias a este trascendental desarrollo, el país podrá garantizar el suministro oportuno y gratuito de cloroquina en las regiones con alta prevalencia de malaria. Esta medida es crucial para abordar una de las enfermedades tropicales más desafiantes en Colombia. Según los datos del Instituto Nacional de Salud, en 2024 los territorios más afectados por la malaria fueron la Costa Pacífica (Chocó, Cauca, Nariño, Buenaventura), Urabá, la región Amazónica y Orinoquía (Putumayo, Caquetá, Vaupés, Vichada, Guainía, Guaviare, Meta y Casanare), y la frontera con Venezuela (Norte de Santander). La producción local de cloroquina eliminará la dependencia de mercados internacionales, asegurando que los medicamentos lleguen a quienes más los necesitan, sin demoras ni interrupciones.
Compromiso con la Soberanía Sanitaria y el Bienestar Social
Esta iniciativa refleja de manera contundente el compromiso del Gobierno del Cambio con una política de Estado centrada en la soberanía sanitaria y el bienestar social. Implica una significativa reducción en la dependencia de mercados internacionales, fortaleciendo las capacidades científicas, tecnológicas, industriales y regulatorias propias del país. En un contexto global donde la interrupción de cadenas de suministro puede tener consecuencias devastadoras, la autosuficiencia en la producción de medicamentos críticos se convierte en un imperativo estratégico.
La malaria, causada por el parásito Plasmodium y transmitida por mosquitos infectados, sigue siendo una amenaza latente para la salud pública en Colombia. Hasta noviembre de 2024, se reportaron más de 110.000 casos en el país, lo que subraya la urgencia de contar con herramientas efectivas y accesibles para su control y tratamiento. En este contexto, el desarrollo nacional de medicamentos como la cloroquina se convierte en una respuesta estratégica desde la ciencia y la innovación, con un impacto directo y positivo en la calidad de vida de miles de colombianos.
La Universidad Pública como Motor de Conocimiento y Transformación
El medicamento fue desarrollado por destacados grupos de investigación de la Universidad de Antioquia, con la valiosa participación de jóvenes investigadores y talentoso talento humano de la Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Alimentarias. Este proceso es un testimonio del papel insustituible de la universidad pública como motor del conocimiento y la transformación social. Demuestra cómo la inversión en educación superior y en investigación aplicada puede traducirse directamente en soluciones concretas para los problemas más apremiantes de la sociedad.
Tras recibir el registro sanitario definitivo por parte del Invima, la UdeA proyecta una ambiciosa producción anual de 1.300.000 tabletas de cloroquina. El primer lote, estimado en 240.000 unidades de 150 mg, está programado para ser entregado en los próximos meses al Ministerio de Salud. Este cargamento inicial será fundamental para abastecer a las regiones más golpeadas por esta enfermedad, marcando el inicio de una nueva era de autosuficiencia y resiliencia en la lucha contra la malaria en Colombia.