El proceso de selección de los nuevos alcaldes locales en Bogotá ha presentado demoras y algunos tropiezos en el camino. Si bien 16 localidades ya cuentan con ternas definidas, otras cuatro – Sumapaz, Antonio Nariño, Usme y Ciudad Bolívar – deberán reiniciar el proceso desde cero debido a la falta de candidatos que cumplieran con los requisitos exigidos.
La Secretaría de Gobierno recibió en junio las ternas provenientes de las Juntas Administradoras Locales (JAL) de 16 localidades. Sin embargo, cuatro localidades no lograron completar este paso fundamental para la elección de sus alcaldes.
En el caso de Usme, ninguno de los 84 aspirantes logró superar el examen establecido como requisito. En Sumapaz, la situación no fue muy diferente: solo 2 de los 29 candidatos aprobaron la prueba, siendo necesario un mínimo de 3 para conformar la terna. Antonio Nariño, por su parte, vio frustrado su proceso debido a la renuncia por motivos personales del único aspirante que había logrado aprobar el examen. Ciudad Bolívar completa el grupo de localidades que deben reiniciar el proceso, ya que ninguno de los postulantes cumplió con la totalidad de los requisitos.
Esta situación atípica retrasa la elección definitiva de los alcaldes locales en estas cuatro localidades. El secretario de Gobierno, Gustavo Quintero, explicó que el proceso se ha extendido más de lo previsto debido a la necesidad de realizar revisiones jurídicas exhaustivas y a la decisión del alcalde, Carlos Fernando Galán, de entrevistar personalmente a todos los candidatos.
“Las entrevistas con el alcalde Galán no fueron cortas, nos tomamos el tiempo para conocer a fondo las propuestas y la visión de cada candidato”, señaló Quintero. A pesar de los retrasos, se espera que en las próximas semanas se defina el cronograma para que Sumapaz, Antonio Nariño, Usme y Ciudad Bolívar puedan elegir a sus nuevos alcaldes locales.
Este nuevo contratiempo pone de manifiesto la importancia de fortalecer los procesos de selección y capacitación para futuros candidatos, asegurando así la participación de profesionales idóneos comprometidos con el desarrollo de sus comunidades.
