El futuro de Daniel Felipe Martínez en el Red Bull–Bora Hansgrohe empieza a tomar un rumbo diferente de cara a la temporada 2026. Desde Europa llegan señales de que el colombiano no sería considerado como jefe de filas en ninguna de las tres grandes vueltas del próximo año, un giro que llama la atención por su experiencia y trayectoria en el pelotón internacional. La estructura alemana ya tiene definido el reparto de liderazgos, lo que marca un panorama claro para el equipo.
Según se conoció, Jai Hindley y Giulio Pellizzari encabezarán el Giro de Italia, dejando poco espacio para que otros aspirantes asuman el mando en la carrera italiana. Para el Tour de Francia, el Bora apostará por Remco Evenepoel y Florian Lipowitz, consolidando un bloque joven pero sólido en busca de la general, mientras que la Vuelta a España volverá a poner el liderazgo en manos de Primoz Roglic, quien mantiene la prioridad en la competencia española.
Un papel de gregario de lujo
Con este panorama, Daniel Martínez no tendría margen para competir como capo en ninguna de las tres grandes. Todo apunta a que su rol será el de gregario de lujo, apoyando a los líderes en montaña y llano, sin la posibilidad de buscar un resultado propio en la general. La decisión implica una reconfiguración de sus objetivos deportivos y de su participación en las carreras más importantes del calendario.
En 2025, Martínez completó el Giro de Italia y terminó en la posición 53 de la clasificación general, un contraste con su brillante 2024, cuando fue subcampeón por detrás de Tadej Pogacar. A sus 29 años, el ciclista colombiano deberá evaluar su lugar en el reparto de responsabilidades del Bora y definir cómo se alinea este nuevo escenario con sus expectativas para 2026, mientras continúa consolidando su presencia en el pelotón europeo.
