El Parque Amberes, ubicado en el sector del Rincón, se ha convertido en un verdadero foco de preocupación para los vecinos de la localidad de Suba. Residentes del área han alzado la voz para denunciar un incremento en las actividades de microtráfico y el consumo de sustancias ilícitas en este espacio público, que antes era un lugar tranquilo para los vecinos.
Según los testimonios de los habitantes cercanos, las ventas de drogas se realizan de manera abierta, especialmente en horas de la tarde y noche. Los habitantes aseguran que el parque, que solía ser un punto de encuentro familiar, ha sido invadido por grupos de personas que, además de traficar con estupefacientes, ocupan ilegalmente las áreas comunes, dificultando el acceso de los demás vecinos.
La denuncia no solo se centra en el microtráfico, sino también en la creciente inseguridad que genera la presencia de estos grupos. Los vecinos aseguran que, cada vez más, sienten miedo al transitar por el parque o incluso caminar por las calles cercanas. Las situaciones de robos y peleas entre personas involucradas en el consumo de drogas han aumentado, haciendo que el lugar sea cada vez más peligroso.
Las autoridades locales, aunque conscientes del problema, han recibido críticas por la falta de acciones efectivas para frenar este fenómeno. Los residentes piden más patrullajes, tanto de la policía como de unidades especializadas en seguridad pública, para garantizar que el parque sea un espacio seguro para la comunidad. También reclaman que se refuercen los controles sobre la ocupación ilegal del espacio público.
Mientras tanto, los vecinos se muestran frustrados y preocupados. Muchos lamentan cómo la falta de intervención ha convertido un espacio público en un sitio de conflicto y riesgo. La venta y consumo de drogas no solo afecta la convivencia, sino que también pone en peligro la integridad de las personas, especialmente de los niños y jóvenes que solían disfrutar del parque sin temor.
Finalmente, los residentes del sector del Rincón piden una respuesta más rápida y contundente por parte de las autoridades para recuperar el Parque Amberes como un lugar de encuentro saludable y seguro. La comunidad espera que, con el apoyo adecuado, se puedan erradicar estas prácticas ilícitas y devolver la tranquilidad a la zona.
