En la más reciente emisión de La Agenda, programa de gobierno y la Presidencia de la República dirigido a medios comunitarios y populares, el director del Departamento para la Prosperidad Social (DPS), Mauricio Rodríguez Amaya, presentó un balance de su último año de gestión. Entre avances, retos y cambios de enfoque, dejó claro que el propósito es replantear la manera en que el Estado apoya a las comunidades, pasando de las ayudas monetarias a estrategias que fortalezcan la economía popular y la organización social.

Rodríguez explicó que la meta del Gobierno del Cambio es transformar el modelo de transferencias monetarias, para que estas no se queden únicamente en un alivio temporal. Según indicó, la idea es que los recursos sirvan como punto de partida para proyectos productivos, que impulsen la asociatividad, el cooperativismo y la inclusión productiva territorial. “La transferencia por sí sola no saca a nadie de la pobreza… necesitamos que se convierta en la base para proyectos productivos”, afirmó, recordando que hoy muchos subsidios se destinan a gastos inmediatos como mercado o deudas, sin dejar un impacto sostenible.
Adiós al asistencialismo: la nueva visión para los medios comunitarios
En cuanto a los medios comunitarios, el director fue enfático en que es necesario “romper la lógica asistencialista”. Recordó que en el pasado se entregaron recursos sin un plan claro de sostenibilidad, lo que llevó a que muchas iniciativas se apagaran con el tiempo. La propuesta ahora es implementar procesos de fortalecimiento de capacidades, creación de redes y cooperativas, y conexión directa con la economía popular y comunitaria, para garantizar que estos medios no dependan únicamente de los aportes del Estado.
Rodríguez también destacó el papel estratégico que pueden tener los medios comunitarios y populares en visibilizar la economía popular, que representa cerca del 32% del PIB nacional, pero que muchas veces permanece invisible. Según explicó, si estos medios logran articularse y trabajar en red, pueden convertirse en voceros de ese sector y en aliados clave para que los productores y organizaciones de base lleguen a más mercados y públicos.
Durante la transmisión, el funcionario respondió preguntas de periodistas de distintas regiones, insistiendo en que ningún proyecto de comunicación comunitaria puede sostenerse solo con recursos públicos permanentes. “No hay manera de que ninguna cooperativa sobreviva a partir de aportes públicos”, dijo, aclarando que el Estado sí puede aportar un capital inicial y ofrecer respaldo en política pública, pero que la verdadera sostenibilidad depende de generar ingresos propios, crear alianzas y conectarse a mercados reales.
Inversión social y desarrollo local: los pilares de la estrategia de Prosperidad Social
En el espacio también se abordaron otros programas de Prosperidad Social, como la universalización de Colombia Mayor, que busca garantizar que para 2026 tres millones de adultos mayores reciban una transferencia mensual de 230 mil pesos. Además, se mencionó el plan de choque contra el hambre Colombia sin hambre, con una inversión de 175 mil millones en 2025, la creación de Puntos de Abastecimiento Solidario y la revitalización de plazas de mercado en todo el país.
Rodríguez subrayó que estas acciones forman parte de una estrategia más amplia para combatir el hambre, reducir las brechas y potenciar las economías locales. La apuesta es llevar alimentos a las regiones más afectadas, dinamizar los mercados y rescatar espacios de comercio tradicional, integrando a campesinos, pequeños productores y redes comunitarias.
Finalmente, el director del DPS reiteró que la visión que impulsa el presidente Gustavo Petro es construir un nuevo modelo económico basado en la productividad territorial, la asociatividad y la integración de distintos sectores. En este engranaje, los medios comunitarios no solo informan, sino que también se convierten en actores económicos y sociales que ayudan a fortalecer el tejido productivo de sus regiones.