La paciencia se agota en el noroccidente de Suba. Residentes del barrio San Carlos Tibabuyes y la Urbanización Cafam (frente a la etapa 7) han elevado su voz ante las autoridades locales y la empresa Área Limpia para exigir el retiro inmediato de cuatro contenedores de basura que, según denuncian, se han convertido en focos de insalubridad e inseguridad debido a la persistente falta de cultura ciudadana.
La vía principal que conecta San Carlos Tibabuyes, Bilbao y la Urbanización Cafam es el escenario de una problemática cada vez más visible: el mal manejo de residuos sólidos. El deterioro de los contenedores, sumado a la disposición incorrecta de escombros, muebles, colchones y otros residuos especiales fuera de ellos, ha generado un punto crítico de acumulación de basura que afecta directamente la calidad de vida de la comunidad.
«La comunidad llega al sitio y en vez de introducir la basura en el contenedor, la botan en los alrededores del contenedor,» lamenta uno de los habitantes de la zona.
Basura, roedores y delincuencia: una mezcla peligrosa
Las fotografías, ampliamente difundidas en redes sociales, evidencian el caos: grandes cantidades de desechos rodean los contenedores, incluso cuando algunos de estos están vacíos.
La problemática se agrava en las noches con la llegada de personas que abandonan ilegalmente residuos voluminosos y escombros. Un habitante señaló a la emisora Suba Alternativa que a altas horas de la noche se depositan «escombros, muebles, sillas de madera y hasta colchones».
Aún más preocupante es el señalamiento a motociclistas, presuntamente vinculados a restaurantes del barrio Bilbao, que llegan a depositar bolsas negras con comida en el punto crítico.
«La comunidad ya los tiene identificados a los señores de las motos dejando gran cantidad de comida, ya tiene las placas de estas motos para hacerle comparendos y ser sancionados y hasta cerrar los restaurantes,» advierte un residente.
La triste consecuencia de esta situación es el rompimiento de estas bolsas por habitantes de calle, lo que atrae de inmediato a roedores, aves carroñeras (chulos) y genera malos olores que afectan incluso a un jardín infantil del distrito cercano.
Además de los problemas sanitarios, los vecinos aseguran que los contenedores llenos de basura se han convertido en un escondite ideal para la delincuencia, contribuyendo al aumento de robos e inseguridad en la zona.
Exigen soluciones integrales
Este punto crítico es solo uno de los más de diez focos de insalubridad que la comunidad tiene identificados en el sector. Estos lugares son calificados como peligrosos debido a la alta concentración de roedores, lixiviados, habitantes de calle y delincuencia.
La comunidad exige a las autoridades locales y a la empresa de aseo avanzar en la recuperación del sitio, pero son conscientes de que la solución debe ir más allá de una simple limpieza.
«Podemos seguir limpiando, pero si otros no se concientizan, no avanzamos. Por eso también realizamos campañas de sensibilización en colegios y los comerciantes de la zona,» asegura un residente.
Los habitantes de San Carlos Tibabuyes y Urbanización Cafam hacen un llamado urgente a la participación ciudadana, la educación ambiental y un control más estricto por parte de las autoridades para sancionar a quienes continúan atentando contra la salubridad y la seguridad del sector.
