Desde julio el nuevo operador «Jardines de Luz y Paz S.A.S» realizará la prestación de los servicios de destino final y atención funeraria de los cementerios distritales Norte, Central, Sur y Parque Serafín. La Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos- UAESP será la encargada de supervisar el cumplimiento de este contrato de concesión.
El proceso de empalme se desarrolló durante cerca de dos meses. En este lapso, se realizaron reuniones, visitas y recorridos a las instalaciones de los cementerios distritales para observar el estado de la infraestructura y el funcionamiento de los servicios de inhumación, exhumación y cremación.
Ingrid Ramírez, subdirectora de Servicios Funerarios y Alumbrado Público de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos-UAESP, al respecto manifestó:
“La Unión Temporal Cementerios del Distrito está conformada por tres empresas: Inversiones, Proyectos y Obras Civiles S.A.S., A&M Grupo Empresarial y Consorcio Global Fundesco. Esperamos que, a través de esta nueva concesión, (…) se suscriba un nuevo capítulo en la historia de los cementerios del Distrito y la prestación en sí misma mejore en un 100 por ciento. Sobre todo, en la infraestructura que tenemos actualmente para que esta sea revitalizada y las personas que deseen puedan visitar nuestros cementerios”.
Respecto a la inversión para el mejoramiento del funcionamiento y las instalaciones, Dairo Mora, director Comercial de Jardines de Luz y Paz S.A.S. de la Unión Temporal Cementerios del Distrito informó:
“Lo primero que vamos a entrar a hacer, es una evaluación detallada del estado actual de la infraestructura. Mejoraremos todo lo que tengamos que mejorar, en cuanto al tema de mobiliario y demás. (…) La inversión estimada o que tenemos presupuestada es alrededor de los 3.000 millones de pesos, 2.500, poco más poco menos, en los primeros seis meses de operación”.
La UAESP, a través del nuevo operador, continuará brindando servicios funerarios de excelencia. Así mismo, seguirá garantizando a la población en condición de vulnerabilidad social, el otorgamiento de subsidios del 90 o 100 por ciento para afrontar situaciones de calamidad, cuando un ser querido fallece y no se cuenta con recursos económicos para asumir los costos de estos servicios.