Ante algunas declaraciones, que en año electoral, pretenden desinformar sobre las condiciones técnicas reales del proyecto Parque San Rafael, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá considera importante precisar lo siguiente:
- Es evidente el desconocimiento por parte de los promotores del debate público sobre el sistema de abastecimiento de agua de la ciudad. El embalse San Rafael es una reserva de agua artificial, que hace parte del sistema de abastecimiento Chingaza, para ser utilizada en casos de emergencia y contingencia el cual siempre debe surtir un proceso de potabilización posterior en la planta Francisco Wiesner antes de llegar a los hogares bogotanos. El agua del embalse es cruda y proviene del río Teusacá y de los ríos Guatiquía, Chuza y la quebrada Leticia. Es inconcebible, qué siendo la misionalidad de la Empresa garantizar las condiciones de calidad, cantidad y continuidad en el suministro de agua, se pretenda afirmar que se pondrá en riesgo esta fuente de agua con las obras de adecuación del parque.
- No existe ninguna limitante legal para la apertura del proceso licitatorio del parque ecológico. Las pretensiones en el marco de distintas acciones populares interpuestas por el sindicato a la fecha han sido negadas. A finales del año 2017, Sintraemsdes radicó una acción popular la cual fue inadmitida por el juzgado y posteriormente rechazada por el Juzgado Sexto Administrativo de Bogotá. En el 2018, nuevamente radican acción popular solicitando como medida cautelar la suspensión de las obras del embalse, el juez mediante Auto del 25 de enero de 2019 negó la medida al considerar que no se demostró el supuesto daño ni la realización de las actividades descritas por la organización sindical en su demanda.
- El parque San Rafael obedece a una obligación de la Empresa de Acueducto de Bogotá con el municipio de La Calera, como una de las medidas de compensación por las obras del Embalse San Rafael en el año 1992. La viabilidad ambiental del parque fue otorgada por la CAR Cundinamarca en el año 2003.
- El proyecto del Parque Ecológico San Rafael se encuentra aprobado en el Plan de Desarrollo, Bogotá Mejor Para Todos, ante el Concejo de la Ciudad, en un proceso democrático en el que participó el partido Polo Democrático y los recursos están garantizados por parte de la Empresa. El Concejo de Bogotá en el segundo semestre de 2017 aprobó el cupo de endeudamiento por un valor de 3.1 billones, para financiar el Plan de Inversiones. La Empresa cuenta con calificación AAA en materia de riesgos, gracias a las buenas prácticas, por lo tanto, no es cierto que este proyecto ponga en riesgo la estabilidad financiera de la empresa.
- La intervención y los diseños aprobados del parque corresponde únicamente al 4.25% del área total de los predios y utiliza la infraestructura de uso público existente. Contempla un sistema constructivo modular, palafítico (sin cimentación) que contribuye a la continuidad de las condiciones físicas del suelo.
- La Empresa de Acueducto realiza mantenimiento permanente sobre las áreas del parque que son invadidas por retamo espinoso, liso, acaciapino y cipes (lo que equivale a 3 hectáreas y a cerca de 2.500 árboles por año) buscando consolidar los procesos de restauración ecológica correspondiente al ecosistema del bosque alto andino. Así mismo, se plantarán más de 70 mil individuos de especies propias de este ecosistema con una densidad de 833 individuos por hectáreas, el parque y el área ganarán adicionalmente 62 mil árboles más de la sustitución de los 2.500 árboles.
- Este proyecto contó con la participación de la comunidad y vecinos del municipio de La Calera, quienes aportaron sus ideas en el diseño de la adecuación del parque para que fuera sostenible y responsable con el medio ambiente.