La patrullera de la Policía Nacional Erika Judith Pérez Romero, adscrita al CAI de La Gaitana, quien se hizo conocida por agredir con su bolillo a un ciudadano en la localidad de Suba, fue suspendida e inhabilitada para ejercer cargos públicos por un período de 10 años. La decisión fue tomada por la Procuraduría tras investigar los hechos ocurridos en octubre de 2024.
El incidente, que tuvo lugar en las inmediaciones del humedal Juan Amarillo, al norte de Bogotá, involucró a la patrullera Pérez Romero y a Juan Sebastián Nova, a quien, según la Procuraduría, la uniformada «abusó de su posición de autoridad y lo golpeó en su rostro con el arma de dotación bastón tonfa» durante un procedimiento de requisa.
El Ministerio Público determinó que la patrullera desconoció los límites de sus funciones, vulnerando los principios de legalidad, proporcionalidad y necesidad que rigen la actuación policial.
En un fallo de primera instancia, la Procuraduría Distrital de Juzgamiento calificó la conducta de Pérez Romero como «gravísima, a título de dolo», lo que llevó a la drástica sanción. La suspensión e inhabilidad por una década le impedirá no solo ejercer su labor como patrullera, sino también desempeñar cualquier otro cargo público.
