El Portal de Suba se convirtió en un escenario lleno de vida, historias y emociones durante la más reciente edición del Festival Patrimonial Suba de Antaño. El evento reunió a decenas de asistentes que, entre aplausos y sonrisas, fueron testigos del talento de 23 agrupaciones conformadas por personas mayores de 50 años.
Más que un espectáculo, el festival fue un verdadero homenaje a la memoria colectiva de la localidad. Cada coreografía, canción y presentación del circuito artístico ‘Aquí entre nos’ estuvo cargada de experiencia, tradición y una energía que desbordó el espacio. Fue un día para reencontrarse con las raíces, a través del arte.
Los adultos mayores fueron los protagonistas indiscutibles de la jornada. Con pasos firmes, voces fuertes y miradas llenas de orgullo, demostraron que la cultura no solo se preserva, sino que también se reinventa con el tiempo. La pasión con la que se entregaron en cada número dejó claro que el arte no tiene edad.
Los asistentes también vivieron una experiencia enriquecedora. Muchos compartieron recuerdos, otros simplemente se dejaron llevar por el ritmo, y hubo quienes se emocionaron hasta las lágrimas. Fue una celebración comunitaria donde se sintió el calor de Suba y el respeto por quienes han construido su historia.
Desde la organización del festival se destacó el valor de estos espacios para fortalecer el tejido social y dar visibilidad a los saberes tradicionales. “Esto no es solo un evento cultural. Es una forma de decirle a nuestros mayores: gracias por todo lo que han entregado, seguimos aprendiendo de ustedes”, expresó una de las promotoras culturales.
El Festival Patrimonial Suba de Antaño dejó una huella profunda en quienes lo vivieron. Recordó que en Suba, la cultura no envejece: se transforma, se comparte y se celebra. Porque cuando la tradición se viste de fiesta, todos somos parte de una historia que sigue bailando.
