Tras dos intensas jornadas de debate que sumaron 25 horas, la Junta Administradora Local (JAL) de Suba dio luz verde al Plan de Desarrollo Local (PDL) 2025-2028, una iniciativa del alcalde local, César Augusto Salamanca, bajo el lema «Confiando en el veci, SUBA CAMINA SEGURA». Este plan, que estará vigente durante los próximos cuatro años, busca impulsar el desarrollo social, económico y ambiental de la localidad.
El PDL de Suba, que cuenta con un presupuesto histórico de 596 mil millones de pesos, está alineado con el Plan de Desarrollo Distrital «Un nuevo contrato social y ambiental para la Bogotá del siglo XXI», impulsado por el alcalde mayor Carlos Fernando Galán. Estos recursos se traducirán en obras, programas y servicios que beneficiarán directamente a los más de 1 millón 300 mil habitantes de Suba.
El alcalde local destacó que el PDL se basa en dos pilares fundamentales: la construcción de una «Ciudadanía 5C» (ciudadanos que se Conectan, se Comportan y Confían) y la consolidación de un equipo de «Suba S.A.S» (Servidores Amables y Solucionadores). Con estas estrategias, se busca fortalecer el tejido social, mejorar la convivencia ciudadana y optimizar la atención a la comunidad.
«Este Plan de Desarrollo Local es una gran responsabilidad que nos llena de esperanza y entusiasmo para trabajar por Suba», afirmó el alcalde Salamanca. «Queremos que nuestra localidad sea un referente a nivel nacional e internacional por su desarrollo integral y su calidad de vida».
Más de la mitad del presupuesto del PDL, el 53%, se destinará a inversión social, con especial énfasis en programas para la reducción de la pobreza, la generación de empleo y el apoyo a poblaciones vulnerables. «Contaremos con recursos para la creación de tres nuevos comedores comunitarios, entre otras iniciativas que buscan mejorar la calidad de vida de nuestros habitantes», puntualizó Salamanca.
El alcalde hizo un llamado a la comunidad para que participe activamente en la ejecución y seguimiento del PDL, y para que juntos construyan una Suba más segura, equitativa y sostenible. «Los invito a que hagamos veeduría ciudadana para garantizar que estos recursos se inviertan de manera transparente y eficiente», concluyó.