Comerciantes formales del barrio Turingia, realizan protestas a esta hora sobre la Av Ciudad de Cali, a la altura del centro comercial Plaza Imperial. Su reclamo: un alto a la competencia desleal que enfrentan a diario por parte de vendedores ambulantes que operan sin las mismas obligaciones tributarias y permisos.
La manifestación reúne a decenas de comerciantes que, con pancartas y arengas, exigen a las autoridades locales tomar medidas contundentes para frenar el crecimiento desmedido de la informalidad en la zona. Su preocupación se ha intensificado con la reciente llegada de «food trucks» que se instalan en el espacio público, agudizando la crisis que atraviesa el comercio formal.
«Estamos al borde de la quiebra», denuncia uno de los manifestantes, quien expresa la frustración que sienten al ver cómo sus negocios, que cumplen con todas las obligaciones legales y tributarias, se ven afectados por la proliferación de vendedores informales que no pagan impuestos, arriendo ni contribuyen al desarrollo del sector.
Los comerciantes formales recalcan que pagan impuestos, Sayco y Acinpro, bomberos, además del arriendo de sus locales, mientras que los vendedores ambulantes se ubican en el espacio público sin ningún tipo de control, generando una competencia desigual que los está llevando a la ruina. La situación se ha tornado insostenible, afirman.
La presencia de dos nuevos «food trucks» en el parque de Turingia ha encendido las alarmas entre los comerciantes, quienes ven con preocupación cómo el espacio público se ve cada vez más invadido por la informalidad. Exigen a la Alcaldía local y a las entidades competentes que intervengan de manera inmediata para recuperar el orden y garantizar la sana convivencia.
La protesta, que mantiene cerrada la importante vía de la capital, ha generado congestión vehicular en la zona. Los manifestantes aseguran que mantendrán su posición hasta que las autoridades locales se comprometan a atender sus reclamos y buscar soluciones concretas a la problemática que los afecta.
El llamado de los comerciantes formales de Turingia es un reflejo de la situación que se vive en muchas ciudades del país, donde la informalidad se ha convertido en un desafío para el comercio legalmente establecido. Se espera que las autoridades tomen cartas en el asunto y generen políticas públicas que permitan un desarrollo comercial equitativo y sostenible.