En el sector de Colina, más exactamente en el parque Gratamira Campestre, vecinos han reportado un notorio aumento de vendedores ambulantes en los últimos meses. Lo que antes era un espacio tranquilo para el deporte y la recreación, hoy se ve cada vez más ocupado por carretas, ventas informales y aglomeraciones que alteran la dinámica del lugar.
Una habitante del sector se comunicó con la emisora Suba Alternativa Noticias para expresar su inconformidad y la de muchos residentes. “Esto va en aumento y nadie hace nada. El parque ya no se puede disfrutar igual, todo está lleno de ventas y basura”, aseguró visiblemente molesta.
Según los testimonios, la presencia constante de comercio informal ha generado desorden, ruido y acumulación de residuos. Además, algunos vecinos mencionan que ya no se sienten cómodos llevando a sus hijos o adultos mayores a este espacio. “Uno siente que ya no hay control, y lo peor es que no vemos a ninguna autoridad intervenir”, comentó otro residente.
La comunidad señala directamente al gobierno local por su falta de acción frente a esta situación. Aseguran que han hecho reportes y enviado peticiones, pero que las respuestas han sido escasas o nulas. La sensación generalizada es de abandono por parte de la administración frente a un problema que, para ellos, va creciendo a la vista de todos.
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Los vecinos no se oponen al trabajo de quienes buscan el sustento diario, pero sí piden orden, regulación y límites claros. “Entendemos que todos necesitamos trabajar, pero el parque es de todos y debe cuidarse. No se puede convertir en una plaza de mercado improvisada”, enfatizó la denunciante.
Por ahora, la comunidad espera un pronunciamiento oficial y, sobre todo, acciones concretas que permitan recuperar el parque como un espacio público de convivencia, libre, seguro y en buenas condiciones para todos los habitantes del sector.
