La situación en el barrio Puertas del Sol, en Suba, se ha vuelto insostenible debido a la acumulación de basura en nueve puntos críticos de la zona. Los vecinos están al borde del colapso, ya que la proliferación de desechos ha atraído aves carroñeras y ratas, poniendo en riesgo la salud de la comunidad. La emergencia ha llegado a tal punto que muchos residentes ya no saben qué más hacer para controlar la situación.
Ana, una residente del barrio desde hace más de 20 años, describe la situación como desesperante. «Nunca habíamos tenido un problema así. Cada día es peor, la basura se acumula y las plagas no nos dejan tranquilos». Según Ana, la situación se ha agravado en los últimos meses, con la falta de recolección de residuos y la poca conciencia de algunos vecinos que continúan dejando sus desechos en las esquinas.
Los puntos críticos identificados por la comunidad son verdaderos focos de infección. Las aves carroñeras se han multiplicado, buscando en los desechos su alimento, mientras que las ratas, con la comida a su alcance, se han convertido en un problema de salud pública. «Es peligroso, especialmente para los niños», comenta Luis, un padre de familia que ya no permite que sus hijos jueguen en la calle debido al temor de que puedan entrar en contacto con estas plagas.
Los intentos de la comunidad por controlar la situación han sido en vano. Aunque algunos vecinos han organizado jornadas de limpieza, el problema persiste debido a la falta de una solución integral. «No es suficiente con que limpiemos una vez al mes, necesitamos que las autoridades tomen acción», dice Marta, quien ha participado en varias de estas jornadas. La sensación de abandono es generalizada entre los residentes.
Además de la molestia y el peligro, la situación también ha afectado el ambiente en el barrio. Lo que antes eran calles limpias y seguras, ahora están marcadas por la presencia constante de basura y el olor desagradable que impregna el aire. «No es justo que tengamos que vivir así, con miedo de salir a la calle por la suciedad y las plagas», expresa Jorge, un comerciante local que ha visto cómo sus clientes se alejan debido a la situación.
Los vecinos de Puerta del Sol hacen un llamado urgente a las autoridades locales para que tomen medidas concretas y sostenibles. La comunidad necesita apoyo para limpiar y mantener las calles libres de basura, y sobre todo, soluciones a largo plazo que eviten que esta crisis vuelva a repetirse. Mientras tanto, la preocupación crece y la esperanza de los residentes se centra en que, finalmente, se escuche su clamor y se devuelva la dignidad a su barrio.