La noche del martes fue todo menos tranquila para un residente de la localidad de Suba, en Bogotá. Cuando apenas descendía de su camioneta, una DIMAS gris, fue abordado por varios hombres armados justo frente a la entrada de su conjunto residencial. El susto fue tan repentino como aterrador: los delincuentes lo encañonaron y lo obligaron a entregar el vehículo en cuestión de segundos.
La víctima, aún conmocionada por el hecho, relató que no tuvo tiempo ni de reaccionar. «Solo pensé en mi vida y en mi familia», dijo. Los delincuentes, que actuaron con evidente coordinación, escaparon rápidamente con la camioneta, sin dejar rastro. El vehículo, según contó, era su herramienta de trabajo y el principal sustento para su hogar.
Sin embargo, lo más grave llegó después. En las horas siguientes al robo, el afectado empezó a recibir llamadas extorsivas. Los delincuentes le exigieron una suma considerable de dinero a cambio de devolverle la camioneta. Entre amenazas y presión psicológica, intentaron aprovecharse del miedo del hombre para obtener un beneficio económico.
La situación ya fue reportada a las autoridades, quienes iniciaron una investigación formal. La Policía Metropolitana de Bogotá confirmó que se están analizando cámaras de seguridad del sector para identificar a los responsables. También se trabaja con la Sijín para rastrear las llamadas y dar con el paradero tanto de los delincuentes como del vehículo.
Este tipo de hechos tiene en vilo a muchos vecinos del sector, quienes aseguran que los robos van en aumento y que la presencia policial es cada vez más limitada. «Uno ya ni se siente seguro en la puerta de su casa», comentó una residente del conjunto afectado, visiblemente preocupada por la inseguridad en la zona.
Ante la ola de delitos, la comunidad de Suba hace un llamado urgente a las autoridades distritales para que refuercen la vigilancia. También se pide a la ciudadanía estar atenta y reportar cualquier movimiento sospechoso. Mientras tanto, la víctima espera que su historia tenga un final menos doloroso y que su vehículo, tan necesario para su vida diaria, aparezca pronto.
