En una mañana llena de aroma y sabor, nos encontramos con Willinton Ortiz, el visionario detrás de Café Del Campo, quien comparte su devoción por el café colombiano. Desde las tierras fértiles del sur del Tolima hasta las calles bulliciosas de Suba, Ortiz nos sumerge en su inspiradora historia de pasión y dedicación al café.
Ortiz nos transporta a sus inicios modestos y su determinación por ofrecer un café excepcional en Bogotá. «Comencé con pruebas y muestras, llevando la esencia de Café Del Campo a los habitantes de Suba. La respuesta fue abrumadoramente positiva, lo que me impulsó a perseguir este sueño con aún más fervor», comparte emocionado.
El meticuloso proceso detrás de Café Del Campo se desvela con fascinantes detalles. Desde el cultivo orgánico hasta la fermentación controlada, Ortiz asegura que cada grano de café exprese su carácter único. «Utilizamos técnicas artesanales que realzan los matices de panela, caramelo y frutas en cada taza», revela, destacando su compromiso con la calidad y la sostenibilidad.
La entrevista se enfoca en educar a los consumidores sobre el verdadero café colombiano. Ortiz destaca: «El proceso de fermentación y el almacenamiento influyen significativamente en el sabor final del café». Café Del Campo emplea empaques innovadores que garantizan frescura y sabor, con una válvula desgasificadora para mantener la calidad óptima.
Café del Campo maneja tres presentaciones una de 200 gramos al público por 12.000 pesos, 500 gramos, que es una libra al público 25.000 pesos o manejan un pack de 2.500 gramos que tiene un costo de 125 mil pesos. Con la gran opción de que el envío es GRATIS estamos dando unos precios accesibles al público.
Por último, Ortiz invita a todos a descubrir Café Del Campo, disponible a través de su página en Instagram y otros canales. «Espero que más personas se unan a nuestra comunidad de amantes del café, apreciando no solo el sabor, sino también el esfuerzo y la pasión que cada taza representa», concluye con una sonrisa contagiosa.