La Secretaría Distrital de Ambiente realizó un seguimiento detallado al impacto ambiental del Día sin Carro y sin Moto que vivió ‘Bogotá, mi Ciudad, mi Casa’, una jornada para promover una movilidad más sostenible y mejorar la calidad del aire en beneficio de la ciudadanía.
La Autoridad Ambiental desplegó siete puntos de control en vía en igual número de localidades, para medir las emisiones de fuentes móviles. «Tras la revisión de 186 vehículos hasta las 6:00 pm, impusimos 152 comparendos ambientales por exceder los límites de emisiones permitidos y 65 automotores fueron inmovilizados. Esto demuestra la necesidad de seguir fortaleciendo el control y la regulación de fuentes móviles, que son una de las principales causas de contaminación en la ciudad», afirmó la secretaria de Ambiente, Adriana Soto.
La secretaria Soto se movilizó desde primera hora en el sistema de bicicletas compartidas de la ciudad y luego abordó TransMilenio, para acompañar uno de los operativos de control a fuentes móviles en la vía.
Las estimaciones preliminares de la jornada muestran reducciones significativas en las emisiones contaminantes: 72% menos en concentraciones de material particulado PM10; 36% menos en carbono negro y 54% menos en PM2.5, el material particulado fino, que es el más peligroso para la salud y proviene principalmente de material resuspendido de tránsito en vía y construcciones.
Adicionalmente, en el suroccidente de la ciudad que es donde históricamente se registran los índices más altos de contaminación, la Secretaría de Ambiente registró una reducción de 31% en las concentraciones de material particulado PM2.5.
Durante la jornada, se realizó monitoreo constante al impacto ambiental mediante las 19 estaciones de la Red de Monitoreo de Calidad del Aire de Bogotá (RMCAB) y los 24 puntos de la Red de Ruido Urbana.
El Índice Bogotano de Calidad del Aire y Riesgo en Salud, Iboca, que los ciudadanos pueden consultar en tiempo real a través de una app, reportó a lo largo de la jornada todas sus estaciones en niveles de riesgo bajo y moderado.
«Uno de los pilares fundamentales de esta administración es reducir la contaminación y con ello mejorar la calidad del aire, para contribuir a la calidad de vida de los ciudadanos y hacer de Bogotá una ciudad más fuerte frente a los efectos del cambio climático», agregó la secretaria de Ambiente, Adriana Soto.
Otro de los impactos medidos fue el ruido ambiental en la ciudad; el 89% del cual proviene de fuentes móviles. Durante la jornada los registros de ruido ambiental mostraron una disminución en el 50% de las estaciones de medición.
- Fuente: Oficina de Prensa Alcaldía Mayor de Bogotá