En septiembre del año pasado el concejal Jorge Torres alertó a la Administración Distrital sobre la grave situación que vivían decenas de adultos mayores en Bogotá; abuelitos que por diferentes circunstancias carecían de un hogar donde pasar las noches frías de la capital.
Y es que el panorama no era nada alentador, pues tras investigaciones y salidas de campo el cabildante pudo constatar que quienes no contaban con un techo recurrían a los Centros Noches de la Secretaría de Integración Social. Sin embargo, solo funcionaban 3: 2 de ellos en la localidad Antonio Nariño y 1 más en la localidad de Puente Aranda, con una capacidad solo para 150 adultos mayores.
Una triste realidad que sometía a los abuelitos a un sorteo con balotas para conseguir un cupo, y quienes no lo lograban tenían 2 alternativas: salir a buscar dinero para intentar costear una cama en los conocidos “paga diarios” o pasar la noche en la calle. “Lamentable situación que además representaba un riesgo inminente para ellos, pues muchos se convertían en víctimas de robos y estaban expuestos a condiciones climáticas hostiles teniendo en cuenta su edad, estado de salud y grado de vulnerabilidad” como lo explicó el concejal Torres.
Pero hoy, gracias al insistente trabajo y control político desde el Concejo de Bogotá, se logró que, tras un proceso licitatorio, el próximo primero de abril se habiliten 3 nuevos centros noche que ofrecerán cupos adicionales para un total de 300 abuelitos atendidos.
De igual forma los esfuerzos adelantados lograron ampliar la atención que ahora llegará a las localidades de Teusaquillo, Los Mártires y Rafael Uribe Uribe; esto con el fin de activar las medidas que le garanticen a la población de adulto mayor sin hogar “las condiciones necesarias que les faciliten una nueva oportunidad para vivir con dignidad”.
