La tenista colombiana Emiliana Arango no pudo superar su debut en el WTA 125 de Vic, España, al caer en un emocionante y disputado encuentro de primera ronda ante la bielorrusa Aliaksandra Sasnovich. El marcador final de 6-7(4), 6-3 y 7-6(5) refleja la paridad del enfrentamiento, que se extendió por más de dos horas y media y se definió en un tiebreak agónico del tercer set.

La derrota marca la quinta consecutiva para la jugadora paisa en la presente gira de arcilla, una superficie que no ha sido predilecta de Arango. Este resultado adverso llega en un momento delicado de la temporada para la colombiana, quien no logró inclinar la balanza a su favor.
El encuentro ante Sasnovich, número 92 del ranking mundial, fue un claro ejemplo de la lucha que Arango planteó en la cancha. El primer set se resolvió en una ajustada muerte súbita, donde la experiencia de la bielorrusa terminó marcando la diferencia por un estrecho margen de 7-4. Sin embargo, lejos de desanimarse, la tenista colombiana reaccionó con determinación en el segundo parcial. Mostró solidez con su servicio y agresividad desde el fondo de la pista para igualar el marcador con un contundente 6-3.
El set decisivo elevó aún más la intensidad del partido. Ambas jugadoras se mostraron firmes con sus saques y lucharon cada punto con garra, intercambiando golpes de calidad y buscando imponer su ritmo. La igualdad fue tal que el set se encaminó inevitablemente a un tiebreak que definiría el destino de ambas en el torneo. En esta instancia final, la tensión se palpaba en el ambiente y cada punto se convirtió en una batalla psicológica. Finalmente, fue Sasnovich quien logró mantener la calma y aprovechar mejor sus oportunidades, cerrando el desempate por un ajustado 7-5 y sellando así su pase a la segunda ronda del certamen español.
A pesar de la derrota, Emiliana Arango dejó destellos de su talento y competitividad, mostrando una actitud luchadora ante una rival de ranking similar. Sin embargo, la incapacidad para concretar los momentos clave y la acumulación de derrotas en la gira de arcilla generan preocupación en el entorno de la tenista colombiana. Esta superficie, conocida por su lentitud y la necesidad de consistencia, parece estar presentando desafíos significativos para Arango en esta temporada.
Esta caída en Vic se suma a una racha negativa que contrasta con el buen inicio de año que tuvo la tenista de 23 años. Recordemos que Arango protagonizó destacadas actuaciones en torneos previos. Su meritoria semifinal en el WTA 125 de Cancún y su sólida participación en el WTA de Mérida, resultados que le permitieron ascender hasta la posición número 84 del ranking mundial, su mejor clasificación histórica hasta el momento. Estos logros generaron grandes expectativas sobre su desempeño en la gira europea, pero la adaptación a la arcilla ha resultado más complicada de lo esperado.
Ahora, la número 84 del mundo deberá realizar un análisis profundo de su juego y trabajar arduamente para revertir esta dinámica negativa. La próxima gran cita en el calendario de Emiliana Arango será el prestigioso WTA 1000 de Roma, un torneo de mayor envergadura. Aquí tendrá la oportunidad de medirse a las mejores jugadoras del mundo y buscar un resultado que le permita recuperar la confianza.
La participación en el WTA 125 de Vic sirvió como una valiosa experiencia para Arango, permitiéndole sumar horas de competición en arcilla. A pesar del sabor amargo de la derrota, la tenista colombiana deberá enfocarse en los aspectos positivos que mostró durante el encuentro. Deberá utilizarlos como base para construir un mejor rendimiento en sus próximos compromisos.
El desafío para Emiliana Arango es claro: superar esta racha de resultados adversos y demostrar su capacidad para competir al más alto nivel. Su talento y su espíritu de lucha son innegables, y la próxima parada en Roma se presenta como una nueva oportunidad para dejar atrás las derrotas y reafirmar su lugar entre las mejores tenistas del circuito mundial. Los aficionados colombianos al tenis seguirán de cerca su evolución, con la esperanza de verla retomar la senda del triunfo en la capital italiana.