Un impactante suceso ocurrido en la localidad de Bosa, al sur de Bogotá, ha revivido la preocupación por la seguridad infantil en los hogares y la necesidad de una supervisión constante. Un niño de tan solo seis años cayó desde la ventana de un tercer piso mientras su padre se ausentaba brevemente para comprar un perro caliente.
Detalles del Accidente
El hecho se registró en el barrio Bosa La Libertad. Según el informe de los residentes, el menor se encontraba solo en el apartamento. Aparentemente, al despertar y no hallar a su padre, se acercó a la ventana para buscarlo, momento en el que perdió el equilibrio y cayó al vacío.
La alarma se encendió entre los vecinos al escuchar el fuerte golpe. De inmediato, alertaron a las autoridades y organismos de emergencia. La rápida intervención y, en especial, el lugar de la caída resultaron cruciales.
El teniente coronel Luis Pardo, oficial de inspección de la Policía Metropolitana de Bogotá, confirmó que el niño cayó sobre un pequeño jardín del conjunto residencial, lo que amortiguó significativamente el impacto.
El oficial informó que, pese a la impresionante altura, “el menor presenta lesiones leves en las extremidades inferiores y fue trasladado a un centro asistencial, donde permanece estable”.
Llamado de atención y prevención
Aunque el caso no terminó en tragedia, la situación ha generado una ola de conmoción y debate sobre la responsabilidad parental.
1.El suceso se presenta semanas después de un caso similar en la ciudad, donde otra menor cayó de un edificio en circunstancias parecidas.
2.El Código de Infancia y Adolescencia es claro: los padres o cuidadores están legalmente obligados a garantizar el bienestar y la seguridad de los menores en todo momento.
3.Dejar a un niño solo, incluso por un corto periodo, especialmente en viviendas de altura, representa un riesgo grave e inminente.
Este incidente sirve como un severo llamado de atención a la comunidad bogotana sobre la vital importancia de la vigilancia ininterrumpida de los niños en casa.









