La presidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio Villa Elisa, Olga Lucía Hernández, se presentó en los micrófonos de Suba Alternativa para hablar sobre los retos y avances de su comunidad. Con más de 30 años de experiencia en el trabajo comunal, Hernández recordó que tras un largo receso, decidió regresar a la junta para dar respuesta a las necesidades de los vecinos, quienes habían perdido la confianza en la gestión de la comunidad. Aunque el trabajo es arduo y a menudo solitario, asegura que siguen luchando por mejorar la calidad de vida del barrio.
Uno de los principales obstáculos que enfrenta Villa Elisa es la apatía de los vecinos, un problema que ha crecido con el tiempo. Según la presidenta, aunque muchos ya tienen sus casas y servicios básicos, han dejado de preocuparse por lo que ocurre en su entorno. Esta indiferencia, sumada a la falta de recursos, complica las labores de la junta, que depende del apoyo ciudadano para sacar adelante proyectos. «Es crucial recuperar la credibilidad de la comunidad», afirmó Hernández.
Entre las problemáticas más urgentes se encuentran las vías del barrio, muchas de las cuales se encuentran en mal estado. A pesar de los esfuerzos de los residentes hace más de 40 años para pavimentar las calles, la falta de mantenimiento ha generado dificultades, especialmente en épocas de lluvia. «Las inundaciones eran terribles, y el polvo en verano, insoportable», recordó. Actualmente, la junta trabaja junto con la alcaldía para lograr el mantenimiento de estas vías y la pavimentación de las áreas que aún no cuentan con este servicio.
La situación del espacio público también es un tema crítico en Villa Elisa. Hernández señaló que el barrio se ha convertido en un parqueadero a cielo abierto, lo que genera conflictos entre los vecinos. «Es común ver furgones y vehículos estacionados en lugares no permitidos», comentó. Además, muchos comerciantes invaden las aceras y las calles con mercancías. A pesar de las sanciones y los esfuerzos por parte de la alcaldía, la presidenta hace un llamado a la conciencia ciudadana para preservar el espacio público.
Otro desafío importante es la gestión de las basuras, un tema recurrente en muchos barrios de la ciudad. Aunque la comunidad ha logrado la colaboración de entidades como UAESP y Área Limpia para la recolección, la falta de responsabilidad de algunos vecinos persiste. Hernández enfatizó la importancia de la clasificación de residuos y el cumplimiento de los horarios de recolección. Además, la junta ha lanzado un proyecto piloto de clasificación de basuras en el barrio, con el objetivo de generar ingresos que se reinvertirán en mejoras para la comunidad.
Finalmente, la presidenta hizo un llamado tanto a la comunidad como al alcalde local. A los vecinos, les pidió más apoyo y colaboración en las actividades comunales, destacando que el trabajo de la junta se realiza sin remuneración. «No necesitamos dedos que nos señalen, sino manos que nos ayuden», dijo. A las autoridades, les solicitó más atención para Villa Elisa, especialmente en lo que respecta al mantenimiento de vías y la seguridad. «Es hora de que la administración local retribuya lo que hemos aportado como comunidad», concluyó.
