El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, anunció que el racionamiento de agua en la ciudad se mantendrá hasta que la crisis sea superada en su totalidad. Esta decisión se tomó tras un balance del primer mes de medidas urgentes, que han mostrado resultados positivos pero aún insuficientes.
«Vamos a estar monitoreando. La decisión hoy es mantener las medidas», dijo Galán. El alcalde añadió que el racionamiento dependerá de cómo sigue evolucionando la reducción de consumo y la situación de los embalses.
Según la gerente de la Empresa de Acueducto de Bogotá, Natasha Avendaño, desde que comenzaron las medidas de racionamiento se han reducido cinco millones de metros cúbicos de consumo de agua en la ciudad. Esto, junto con las lluvias de la última semana, ha ayudado a disminuir la presión sobre el sistema Chingaza, que abastece el 70% del agua de Bogotá.
Sin embargo, las autoridades reconocen que aún queda mucho camino por recorrer. Por ello, han anunciado nuevas medidas basadas en recomendaciones de una misión de expertos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Entre las nuevas medidas destacan:
- Recorridos en todas las localidades para marcar las casas que implementen prácticas de reducción de consumo de agua.
- Análisis de alternativas de abastecimiento de agua con un enfoque de riesgo.
- Apoyo en el diseño de la agenda 2030 para promover una ciudad más sostenible.
El alcalde Galán enfatizó que la meta es lograr un cambio estructural en el comportamiento de los bogotanos para reducir el consumo y el mal uso del agua. «En el momento en que empiecen a bajar los niveles de los embalses a final de año se darán a conocer nuevas indicaciones», anotó el alcalde.
Mientras tanto, las autoridades piden a la ciudadanía continuar con las medidas de ahorro y uso responsable del agua.
