Todos hemos experimentado el dolor alguna vez, pero para quienes sufren de dolor crónico, esa sensación se convierte en un compañero no deseado que afecta cada aspecto de la vida. Este tipo de dolor, que persiste por más de tres a seis meses, no solo impacta físicamente, sino que también afecta el bienestar emocional y social. A nivel mundial, se estima que más de 100 millones de personas padecen dolor crónico, superando el número de casos de enfermedades cardíacas, cáncer y diabetes juntas.
En Colombia, el desafío es aún mayor para los pacientes oncológicos. Cada año, más de 113.000 personas son diagnosticadas con cáncer, y hasta el 90% de ellos sufre de dolor intenso en algún momento de su enfermedad. Este dolor no solo afecta su salud física, también altera el sueño, el estado de ánimo y la capacidad de realizar actividades diarias.
Para ayudar a estos pacientes a encontrar alivio, es clave conocer las opciones disponibles. Durante este mes, dedicado a la sensibilización sobre el manejo del dolor, es importante mencionar algunas estrategias que pueden marcar la diferencia en la vida de quienes padecen dolor crónico, especialmente en pacientes oncológicos.
1. Comunicar siempre el dolor al médico
Es esencial que los pacientes se sientan cómodos para hablar abiertamente con su equipo médico sobre la intensidad y características de su dolor. Cada detalle cuenta, desde la frecuencia hasta los momentos en los que el dolor se intensifica. Esta comunicación permite que el tratamiento sea ajustado según las necesidades particulares de cada paciente.
Hoy en día, hay múltiples opciones disponibles, desde analgésicos hasta terapias no farmacológicas como fisioterapia, técnicas de relajación o tratamientos alternativos.
2. Un estilo de vida saludable puede complementar la terapia
El manejo del dolor no se limita solo a los medicamentos. Incorporar técnicas como ejercicios de respiración controlada, yoga, meditación o incluso hipnoterapia puede ayudar a reducir la percepción del dolor. Estas prácticas no solo mejoran la relajación, sino que también brindan a las pacientes herramientas para enfrentar mejor el día a día.
Muchos pacientes encuentran alivio adicional al complementar los tratamientos convencionales con estas técnicas, creando un enfoque más integral y personalizado para el manejo del dolor.
3. Infusión controlada de medicamentos
Para quienes lidian con dolor crónico y buscan una alternativa a los medicamentos orales, las bombas de infusión son una opción efectiva y segura. Estos dispositivos, cubiertos por el Plan de Beneficios en Salud en Colombia, se implantan de manera mínimamente invasiva bajo la piel del abdomen, liberando dosis controladas de medicamentos directamente en la columna vertebral, justo donde se necesitan.
Este enfoque permite reducir la cantidad de medicamento necesario y los efectos secundarios asociados al consumo oral haciendo que el paciente retome el control de su vida diaria.
4. Estimulación de Médula Espinal
Si el dolor crónico no está respondiendo a los medicamentos y tratamientos, el médico podría recomendar otra alternativa de tratamiento llamada estimulación de la médula espinal, también conocida como neuroestimulación. Este innovador tratamiento se aplica utilizando una pieza llamada neuroestimulador, similar a un marcapasos, que se pone debajo de la piel. El dispositivo libera descargas eléctricas pequeñas a su columna, ayudando a aliviar el dolor.
Referencia:
International Agency for Research on Cáncer. Estimated number of deaths in 2020, Colombia, both sexes, all ages. 2021. Disponible en: https://gco.iarc.fr/today/explore