La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) inicia un trabajo de seguimiento y control para la trazabilidad de los productos que provienen del aprovechamiento forestal. Las visitas a las empresas dedicadas a esta labor se harán con el propósito de verificar la conducta frente al recurso flora dentro de nuestro territorio.
La Dirección Regional Alto Magdalena en Girardot, inició esta labor de seguimiento y control que promueve acciones de cuidado del medio ambiente. Esta regional cuenta con un inventario inicial de 28 empresas de aprovechamiento forestal maderable y 8 de no maderable, específicamente viveros.
La autoridad ambiental lidera una iniciativa crucial para la gobernanza forestal en su territorio, buscando un cambio de paradigma: pasar de la mera extracción de recursos a procesos de aprovechamiento sostenible, en armonía con la naturaleza de los ecosistemas y las comunidades. Este esfuerzo, que además fomenta la legalización de los productos forestales, se alinea con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible a través de la plataforma «Vital», ofreciendo a las empresas certificaciones y parámetros para elevar la calidad de sus productos.

Para la Corporación, la conservación y el uso sostenible de la flora silvestre son de vital importancia, considerándolos un recurso estratégico para la nación. Por ello, un pilar fundamental de esta nueva visión es la trazabilidad de los recursos boscosos, desde su recolección hasta su transformación, garantizando así un control y regulación adecuados del aprovechamiento forestal.
Igualmente, desde la entidad dedicada a la protección de los recursos naturales se insistió en que el aprovechamiento forestal sostenible debe realizarse bajo las normas ambientales vigentes, el permiso respectivo, junto con los documentos legales de propiedad y de idoneidad, que el propietario o conductor del proceso realice y aplique el plan de manejo forestal con los respectivos estudios que evalúan el impacto sobre los componentes bióticos y abióticos, como el agua, el suelo y el aire.
“Desafortunadamente, estamos viviendo en nuestro territorio más que un aprovechamiento forestal, una explotación de los recursos de fauna silvestre. Por ese motivo es de gran importancia comenzar a realizar las debidas operaciones de control, regulación y de seguimiento a las empresas de aprovechamiento forestal”, puntualizó el ingeniero forestal de la regional Alto Magdalena, José Edilberto Sarmiento Naranjo.
Finalmente, la Corporación hace un llamado a la conciencia ambiental para que las empresas adopten el apropiado manejo de los procesos y evitar afectaciones a la fauna silvestre, el recurso hídrico, el suelo y el aire. Para esto se deben adoptar medidas correctivas y oportunas para minimizar y neutralizar los efectos de intervenir en los bosques de nuestro territorio y lograr conservar sus funciones biológicas y así poder generar bienes y servicios de forma sostenible.