La capital colombiana se prepara para enfrentar los desafíos del cambio climático con un ambicioso plan que busca convertirla en una ciudad más resiliente y sostenible. El Plan Distrital de Desarrollo «Bogotá Camina Segura» 2024-2027, liderado por la Secretaría de Ambiente, propone cinco ejes fundamentales para mitigar los impactos del clima y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Ante el aumento de las alertas por calidad del aire, incendios y sequías en la última década, la ciudad se enfoca en la reducción de la vulnerabilidad al cambio climático. Se implementará un programa de restauración ecológica en áreas estratégicas como la Reserva Van der Hammen, los Cerros Orientales, los humedales y el río Bogotá, fortaleciendo la conectividad entre estos ecosistemas vitales para la ciudad.
La mejora de la calidad del aire es otro de los pilares del plan. Se creará el Fondo de Renovación del Parque Automotor de Carga (Foncarga) para impulsar tecnologías limpias en el transporte de carga, en colaboración con la Secretaría de Movilidad. Además, se establecerán Zonas Urbanas por un Mejor Aire (ZUMA) en el suroccidente de la ciudad.
La renovación urbana verde jugará un papel fundamental en la adaptación al cambio climático. Se promoverá la revitalización de áreas con deficiencias ambientales, aumentando la cobertura vegetal, especialmente en el sur y suroccidente de Bogotá, mediante la colaboración entre diferentes entidades distritales.
Para asegurar el cumplimiento de las metas ambientales, se fortalecerá la autoridad ambiental con programas de medición, monitoreo y control de la calidad del aire, suelo y agua. Se intensificará la supervisión de actividades industriales y comerciales para prevenir daños ambientales y se agilizarán los procesos sancionatorios.
Finalmente, la protección animal también se incluye como un eje transversal en la construcción de una ciudad más sostenible. Se fortalecerá al Instituto de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA) para combatir el maltrato y el abandono animal, intensificando operativos contra el tráfico ilegal de fauna silvestre.
Con estas acciones, Bogotá se posiciona como una ciudad que apuesta por la sostenibilidad y el bienestar de sus ciudadanos, consolidando un futuro más verde y resiliente frente a los desafíos del cambio climático.
