La noche del martes 27 de mayo se tornó caótica en el barrio La Gaitana, en la localidad de Suba, luego de que vándalos saquearan un supermercado D1. El hecho se produjo en medio de una jornada de disturbios que se extendió por el sector de La Gaitana, donde encapuchados se infiltraron en manifestaciones pacíficas en memoria de Angie Rodríguez, la joven que falleció tras un procedimiento policial.
Según relatos de testigos y líderes comunitarios que participaban en una velatón pacífica, un grupo de individuos encapuchados llegó al lugar y comenzó a incitar a la violencia. «Estábamos con la mamá, niños pequeños y mujeres de diferentes organizaciones. Todo bien, cantábamos y todo eso de manera pacífica, pero llegó un carro con unos chicos encapotados y comenzaron a decir que no se iba a quedar así, que iba a un lado a otro. Nosotros salimos y eso se vuelve un caos total», narró una líder de una fundación presente en el lugar.
Los actos vandálicos no se limitaron al saqueo del supermercado D1. Los encapuchados también se tomaron las calles, lanzando piedras contra el Comando de Atención Inmediata (CAI) de La Gaitana, buses del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) y articulados de TransMilenio, generando temor e interrupción en la movilidad de la zona.
Imágenes y videos que circulan en redes sociales evidencian la magnitud del saqueo al supermercado D1 del barrio Nogales de Tibabuyes. El establecimiento amaneció completamente desocupado y con visibles daños en su infraestructura. Los delincuentes no solo se llevaron alimentos y productos de primera necesidad, sino que también hurtaron los equipos de facturación del local. La frase «¡Hasta el arroz se llevaron!» resume la desolación y el nivel de despojo sufrido por el supermercado.
Hasta el momento, las autoridades no han identificado a los responsables del saqueo. Sin embargo, fuentes oficiales confirmaron que ya se encuentran adelantando las investigaciones pertinentes para dar con el paradero de los vándalos y llevarlos ante la justicia.
Este lamentable hecho se suma a la creciente preocupación por la infiltración de elementos violentos en manifestaciones legítimas, quienes aprovechan la coyuntura para cometer actos delictivos que afectan directamente a la comunidad y al tejido social de la ciudad. Las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía a mantener la calma y a colaborar con la investigación para identificar y judicializar a los responsables de estos actos vandálicos.
