En respuesta a una denuncia presentada por la comunidad de la vereda Paramón, en el municipio de Pulí, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca – CAR activó un operativo de control a través del cual se evidenció una grave afectación ambiental en el área protegida del Distrito Regional de Manejo Integrado (DRMI) cerro El Tabor.
En el predio, técnicos de la dirección regional Magdalena Centro de la CAR constataron la tala de 22 especies nativas entre ocobos, cámbulos, higuerones, mohos y cucharos que representan un volumen de 36 metros cúbicos totales de madera, la cual no contaba con permiso de aprovechamiento por parte de la autoridad ambiental para sembrar los árboles.
“En desarrollo de nuestra visita generamos el correspondiente informe técnico a partir de lo observado y dispusimos iniciar un proceso sancionatorio en contra de los presuntos infractores”, afirmó el director regional Magdalena Centro de la CAR, Juan Carlos Escobar.
El funcionario explicó además que dos los árboles que fueron talados se encontraban dentro la zona protectora de nacimiento e influencia de tres fuentes hídricas que desembocan en el río Magdalena, lo cual podría incidir en el equilibrio ambiental y la disponibilidad hídrica de la región.
“Las afectaciones a los recursos agua y flora están generando una pérdida significativa en los ecosistemas del territorio, especialmente en el cerro El Tabor, un espacio de alto valor ambiental que funciona como refugio para la fauna silvestre y como fuente abastecedora de agua para los municipios San Juan de Rioseco, Beltrán y Pulí”, subrayó el director regional Escobar.
La CAR reafirma su compromiso con la vigilancia y control de los recursos naturales, así como con la protección y conservación de sus áreas especiales, en cumplimiento de los compromisos asumidos con la comunidad en el Plan de Acción Cuatrienal – PAC 2024-2027 y en el marco de la línea estratégica Gestión integral del recurso hídrico, la biodiversidad y los servicios ecosistémicos.
