En plena temporada navideña, los vecinos de Suba denuncian un aumento significativo en las ventas informales alrededor de puntos estratégicos de la localidad, como el Centro Comercial Subazar, Centro Suba y las inmediaciones de la Alcaldía Local. La comunidad señala que esta situación está generando problemas en el espacio público e incrementando la percepción de inseguridad.
«Es imposible caminar por las aceras. Los vendedores invaden todo y nos obligan a bajarnos a la calle, lo que es muy peligroso, sobre todo en horas pico», comentó Sandra Gómez, residente del sector, durante una entrevista.
Además, los comerciantes formales también han expresado su preocupación, ya que consideran que estas ventas afectan sus negocios. «Nosotros cumplimos con todos los requisitos legales, pero la informalidad nos golpea duro, especialmente en una temporada donde esperamos mayores ingresos», afirmó Jaime Pardo, propietario de una tienda cercana.
Por su parte, varios habitantes han denunciado que el desorden generado por la venta ambulante también ha atraído a delincuentes que aprovechan las aglomeraciones para cometer robos. «Hay más carteristas que nunca. Uno ya no sabe si salir tranquilo a hacer compras porque corre el riesgo de ser robado», señaló Marta Ramírez, quien vive cerca de Centro Suba.
Las autoridades locales han informado que están reforzando los operativos para recuperar el espacio público y garantizar la seguridad de los residentes y visitantes en estas fechas. Sin embargo, muchos vecinos sienten que estas acciones no son suficientes y piden mayor presencia policial y alternativas laborales para los vendedores informales.
Mientras tanto, la comunidad de Suba espera que se encuentren soluciones que equilibren las necesidades de los comerciantes informales con el derecho al espacio público y la seguridad de todos los ciudadanos.
